Este año hemos hecho algo que parecía imposible: mejorar el sabor de nuestras torrijas. Lo teníamos fácil y, como siempre estuvieron riquísimas, dado que las elaboramos con nuestra tradicional receta de más de 100 años, nunca habíamos experimentado mejorar este dulce tan típico de Semana Santa. La torrijas típicas son de leche o vino y actualmente también utilizan con chocolate, natillas o miel pero nosotros las seguimos haciendo con leche.
¡Utilizar nuestro pan blanco, con el formato de ‘pan de molde’ ha sido todo un descubrimiento! Este pan blanco artesanal sin colorantes ni conservantes es el secreto por el que tanto nos preguntáis y que os está llevando a decirnos, una y otra vez, que este año nuestras torrijas están más deliciosas que nunca.
¡Gracias! 🙂